Fraude de correo

El 78% de los hombres y mujeres jubilados del ejército han sido el enfoque de estos esquemas. Los veteranos implícitamente confían en sus compañeros militares, haciéndolos más vulnerables a los reclamos fraudulentos que hacen los impostores relacionados con los beneficios, empleo y descuentos especiales.

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Puedes encontrarte sin suerte si no sabes la diferencia entre una ganancia legítima y un esquema fraudulento de sorteo. Si sientes presión en tomar acción y tienes que enviar dinero para colectar tu premio, entonces no haz ganado nada.

El fraude de empleo es un intento de engañar a las personas que están buscando empleo al darles esperanzas falsas. Esquemas fraudulentos de empleo, como los esquemas piramidales, esquemas de cobro de cheques, y ofertas de trabajo falsas, típicamente solicitan información personal, detalles bancarios, o un soborno para asegurar el trabajo.

El fraude de telemercadeo comúnmente comienza con tarjetas postales o cartas en el correo describiendo una oferta atractiva con una llamada telefónica gratuita a un número 900 o un número 800. Cuando llamas, el vendedor telefónico comúnmente tiene un discurso de venta convincente y utiliza tácticas de venta de alta presión para engañar al ganador y que éste entregue su información personal.

El fraude financiero es un engaño en el cual se utilizan transacciones financieras para beneficios personales. Cualquier oferta que requiera un pago primero – por una tarjeta de crédito sin una verificación de crédito, un avance de préstamo, o una impresionante oferta de un producto o servicio – probablemente es una estafa.

Otro fraude de correo incluye folletos ofreciendo servicios por precios inusualmente bajos, notificaciones de una herencia falsa, y notificaciones pidiendo pagos por servicios gratuitos (como poniendo tu nombre en el Registro Nacional No Llame). Estos esquemas utilizan el correo de una forma u otra para convencer a las personas y solicitar dinero.